“LA VISITA”, POEMA DE J. P. RIVEROS.
Cuando tengo mi casa ordenada, y todo luce bien dispuesto. O, más aún, si el ambiente es grato y cordial, ella, sin aviso previo, visita mi hogar. Acude con su sonrisa levemente voluptuosa e inicua como una niña consentida. Nada dice. Sólo mira. Y, justo es decir, lo hace con ternura aunque con un…